Cuscus es un término que invita a la confusión porque se refiere tanto a la sémola de trigo cocida (foto con las manos) como al guiso que tiene como base el cuscus acompañado de verduras y pollo.  que se ve en la foto de abajo a la izquierda. Es uno de los ingredientes más tradicionales del Magreb.

La forma tradicional de prepararlo es cocerlo al vapor colocando una especie de vaporera que ajusta exactamente encima de la cacerola de preparación del plato principal (Pollo con verduras, etc.)  de forma que los vapores de cocer pollo y verduras vayan cociendo lentamente la semola de trigo.

En nuestra receta vamos a optar por una solución nautica mucho más sencilla:  Utilizaremos cuscus precocido facil de encontrar en la mayoría de los supermercados medianos y grandes.

Dado que es un producto que se incorpora a otras recetas no indicamos para cuantos comensales es, aunque se puede calcular como si fuese pasta italiana.  Puede prepararse con antelación porque si se guarda en un recipiente cerrado se conserva un dia a temperatura ambiente y varios en la nevera.

Sólo un matiz en la preparación en función de que se vaya a utilizar como guarnición de un plato caliente como un Tajine o para hacer un plato frío como el tabule

Ingredientes: 

• 500gr de Cuscus / Semola precocida se convierten en 1kg  de cuscus listo para comer.
• 500 o 600 cl de agua (Depende del fabricante, consultar la caja)
• Sal
• 2 cucharadas de Aceite

Preparación: 

• Medir el agua.
• Si se va a utilizar como guarnición de un plato caliente, poner el agua a hervir, si no vale del tiempo.
• Colocar la semola en una cacerola o bol con espacio de sobra, ya que vamos a duplicar su volumen
• Echar sal mezclar y luego añadir el aceite
• Cuando esté lista el agua (hirviendo si es lo que toca), echar sobre el cuscus, revolver para que se empape todo y dejar al reposo.
• Al cabo de unos 10 – 15 minutos la semola habrá absorbido todo el agua y el cuscus estará apelmazado.
• Rascar con un tenedor el cuscus para ir desmenuzandolo. Normalmente, quedan algunos «tropezones/grumos» que hay que desmenuzar con las manos o con un par de cubiertos hasta que esté totalmente suelto.  Conviene colarlo por un escurre verduras para asegurarse de que no queda ningún grumo.
• Guardar en un recipiente cerrado y si está caliente, proteger para que se mantenga el calor.